En los dos últimos años, muchas empresas y residentes de otros estados de EE.UU. han emigrado al sur de Florida, lo que ha provocado un fuerte aumento de los alquileres. Los promotores inmobiliarios no desaprovecharon esta oportunidad, aumentando los volúmenes de nuevas construcciones, principalmente de viviendas plurifamiliares.
La demanda de apartamentos alcanzó cotas sin precedentes, y los alquileres se dispararon en consecuencia. Desde febrero de 2020 hasta marzo de 2022, aumentó un 58% en el sur de Florida, el más alto de todo el país.
Sin embargo, son los proyectos de viviendas multifamiliares los que ahora están en suspenso. Los expertos estiman la cantidad de construcciones suspendidas en aproximadamente 5.000 apartamentos. Gus Cabrera, Presidente de la Asociación de Constructores Latinos, no nota todavía un fuerte descenso, pero admite que los miembros de la Asociación continúan la construcción de proyectos que ya consiguieron financiar antes de que se dispararan los tipos de interés. Mientras tanto, los agentes del mercado parecen estar preparándose para una desaceleración, que afectará sobre todo a las viviendas plurifamiliares y a los apartamentos bajos con jardín y césped a su alrededor.
El crecimiento de los alquileres se ha ralentizado en el sur de Florida. Según el Índice de Alquileres de Waller, Weeks y Johnson, las tarifas subieron un 9,6% interanual en enero de 2023, pero se redujeron un 0,12% intermensual.
En estas circunstancias, no tiene sentido desde el punto de vista financiero que los promotores inicien nuevas construcciones, ya que los inmuebles residenciales costarán a los inversores mucho más que los ingresos por alquiler que recibirán de los futuros inquilinos.