Según los profesionales de bienes raíces, el mercado del sur de la Florida no tenía a dónde moverse, excepto para declinar después de una tasa de crecimiento frenética en 2022. Al mismo tiempo, el segundo trimestre de este año resultó ser estable. En Miami, las transacciones de residencias de lujo, el 10% superior del mercado, disminuyeron un 17,7% interanual, pero aumentaron un 22,9% en comparación con los primeros tres meses del año.
El precio promedio de una casa de lujo en Miami apenas ha cambiado en comparación con el mismo período en 2022, solo un 0,5%. Al mismo tiempo, aumentó un 15,3% en comparación con el trimestre anterior y ascendió a poco más de $ 3 millones.
La situación es similar en las ciudades costeras del condado de Miami-Dade, que incluyen Sunny Isles Beach, Bel Harbour, Bay Harbour Islands, Surfside, Miami Beach, Fisher Island y Key Biscayne. Allí, las ventas de casas unifamiliares y condominios cayeron un 46% anual. El precio medio de las viviendas unifamiliares disminuyó en un 31% a $2.9 millones, mientras que el costo de los condominios aumentó en un 2% a un precio promedio de $ 538,000.
Los datos mostraron: las ventas de viviendas unifamiliares cayeron un 34% interanual. Además de la desaceleración registrada en las ciudades playeras de Miami en comparación con el mercado en auge en 2022, el crecimiento trimestral de cada tipo de bienes raíces indica que el mercado comienza a normalizarse.